Los
días aquí pasan tan rápidos y están tan cargados de aventuras y anécdotas que
me encantaría poder escribir cada día para compartirlos con vosotros y que
forméis parte de ello. Ayer hizo una semana que empezó el viaje y cada día me
apetece mas que estos tres meses se pudieran alargar y estirar como un chicle
para tener mas tiempo. Hay tanto que ver y descubrir que parece que las 24h que
tiene un día no sean suficientes. Después de Mumbai y mi primer contacto con
cuevas y templos en la Isla Elefanta tras un viaje en barco me dirigí a las 6h
de la mañana a coger mi primer tren de largo recorrido en tierras indias hasta
Aurangabad. El precio era escandalosamente económico, 1'20 euros por el largo
trayecto. Como era de esperar fui la única occidental en todo el vagón y en los
vagones que le seguían al mío y eso me permitió mezclarme con la gente local,
jugar con mis compañeras de asiento (Sumaia de un año y medio y su joven madre
Numri)
Sin entendernos ni una palabra pero
comunicándonos de otra manera y hablar con otros que se defendían con el
inglés. Generosos, es lo que puedo decir de ellos. Me dieron comida a probar,
consejos y reímos tomando fotos.
Llegué
finalmente a Aurangabad con casi dos horas de retraso, común en este país, y
empezó la búsqueda de un lugar donde dormir. El destino final fue de nuevo la
estación de tren donde hay habitaciones muy bartas. Pasé el dia caminando por
la ciudad hasta parar a comer algo en un puesto familiar en medio de la
calle.
Allí
empezé una fantastica conversación hasta llegar al punto de despedida cerca de
la estación con Sujid, un medico casado y padre de dos hijos (familia que
conocí al completo el ultimo día en mi estancia allí por sorpresa), cristiano y
que me habló mucho de su fe y su religión.
Al
día siguiente me dirigí a Ajanta, a 3 horas en bus de Aurangabad y donde conocí
a la fantástica y desde ese día inseparable Milica, una chica Serbia que lleva
8 meses recorriendo mundo con la que paso horas hablando y riendo. De fuerte
personalidad y carácter, paleontologa y biologa marina, decidida, fuerte, sin
tonterías, sincera, lista y a la vez dulce aunque al primer contacto no lo
dirías. Me encanta hablar con ella. Los templos de Ajanta estaban cargados de
pinturas que te trasnportan a otro lugar realizados con pigmentos naturales.
Allí conocí a Tim, un australiano fotógrafo que mr pidió formar parte de una de
sus fotografías y que mas tarde me pediria permiso para tomarme como parte de
su proyecto fotográfico "People of our World" un proyecto bonito,
cargado de talento y de mucha sensibilidad, donde cada fotografía o retrato
relata una historia. Me pregunto que historia habrá visto en mi para inspirarle
a que forme parte del proyecto la verdad, pero me hace ilusión.
Al
dia los tres juntos, Milica, Tim y yo nos fuimos a Ellora a ver otros templos
mas salvajes. Me gustaron más. Allí un chico indio nos improvisó una excursión
a unas " piscinas" naturales por solo gozar de hablar y curiosear
sobre nuestras vidas. Su nombre es Wasib. Por supuesto la pregunta estrella:
"Where are you from" acompañado de un " Are you married?".
Esto forma parte ya del dia a dia junto con el sentirte como una estrella de
cine cuando te piden 200 veces al dia si ae pueden hacer fotos contigo a la vez
que te preguntan mil niños a la vez tu nombre y procedencia mientras todos
intentan saludarte y darte la mano. Es surrealista. Pensé que sería solo yo la
que desearía fotografiar sus expresivos ojos y bonitas costumbres. Pasamos la
jornada hablando, caminando y descansando entre templos. De vuelta a
"casa" y tras subir los tres a un taxi compartido con otros 6 indios
con tal de conseguir el mismo precio que viajando en bus, aun hubo algo que
hizo mas redondo el día. Ya nos íbamos y justo antes de arrancar entraron dos
personas mas. Hasta ahí todo bien, mi sorpresa fue cuando vi que una de ellas
era Monica, la chica brasileña que conocí en Mumbai con la que tenia que
asistir a la boda india. Iba acompañada de Sashi, su amiga india procedente de
Chennai con la que vive en EEUU. Decidimos ir a cenar todos juntos junto con el
host de Mili que nos esperaba en el pueblo, en la estación de bus.
Fue
entonces cuando conocí a Josh, un chico de Kenya que vive allí hace 5 años y
estudia periodismo. El responsable de hacer de Aurangabad un lugar inolvidable.
No solo porque nos mostró todos los rincones de la ciudad y nos hizo reir y
vivir el " indian style" en la carretera durante 30 min de trayecto
montados 4 personas en una scooty, sino por que hay pocas personas como él.
Lleno de entusiasmo, apasionado, hablador insaciable, de una inteligencia
abrumadora y una curiosidad por la vida inagotable. Generoso, con sueños y
ganas de soñar todo y las dificultades, más que cualquier otro por razones
económicas, personales, familiares y su color de piel. Pero dispuesto a
devolver una sonrisa, a estar contento y agradecido, y siempre atento a
ayudar. De esa manera acabé durmiendo en su casa junto con Mili que ya
llevaba dos o tres días. No me dejaron que pagara ni una noche mas de hostal,
así que recogí mi mochila y me adoptó en su casa por dos noches hasta que Mili
y yo nos pusimos rumbo a Gokarna, nuestra nueva meta.
Elia! que bien tener buenas noticias tuyas! ole tu!! sigue disfrutando guapa! una abraçada gegant!!!!
ResponderEliminarYou are a Spanish queen, a jewel with caring heart , I wish you a safe trip, adventure and Happy life...your words are touching like a wordsmith writ, you are appreciative and Lovely Elia.
ResponderEliminarPerò quants amics fas en un sol dia??!! Me n'alegro moltíssim!! Quan llegeixo el que escrius, sembla que t'acompanyi aquí i allà! Molts petons bonica!! :)
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